¡Excelente inicio de semana!
Hoy quiero hablar un poco de la "bonita" costumbre de regatear. El fin me puse en Mi Armario Garage, como les había comentado en -este post-, y bueno estás en una venta de segunda mano y la gente regatea, en este caso no importa pues no estás regateando el trabajo/oficio de alguien, algo que me pasó es que tenía unos zapatos en $100 pesos, marca Steve Madden y en súper buen estado, es un precio justo ¿no crees?, total que una señora me dijo que ya solo tenía $80 pesos que si se los dejaba a ese precio, le dije que estaba bien (después de comentarle que el precio estaba súper barato) y terminó pagándome con un billete de $200, pero repito, en este caso no importa, solo te quedas así como "bueno...espero que esos $20 pesos te sirvan mucho."
A lo que voy es que me puse a pensar en cómo podemos llegar a ser, y ya lo había pensado hace mucho, en verdad que regatear está fatal y no hablo por lo que me pasó, pero normalmente queremos un precio menor de un servicio o producto de alguien que vive y come de eso, por ejemplo: de los artesanos mexicanos, del fontanero, del albañil, de la persona que te ayuda con el aseo, del señor que vende "x" cosa en un puestito, de los que venden flores en las esquinas...O sea...¿Es en serio? Pero si vamos a Zara, o a comer a un restaurante, compramos una artesanía en otro país o vamos a una tienda de muebles o arte, pagamos el precio que es, que tiene una ganancia mucho mayor a la de las personas a las que regateamos, ¿me explico? Me da un poco-mucho- de coraje ver que conocidos pidan rebajar un precio a un pintor o un fontanero o algo así, si no te gusta su cotización, pues busca otro, pero no le quites valor a su trabajo.
Lo mismo pasa con amistades que tienen "x" negocio, a esta edad (casi 30) que es cuando todas las personas que conocemos quieren tener éxito en lo que hacen, tener ahorros en el banco, formar una familia, invertir más dinero en su negocio, y mil razones más...les pedimos precio especial en sus servicios o productos, y muchas veces por pena el amigo accede, y el otro amigo se acostumbra a ese precio especial y ¿saben qué? no se me hace justo, si yo como dueña de mi negocio (es un ejemplo, porque no tengo negocio jaja) te quiero dar un precio especial, te lo voy a dar sin que me lo pidas, creo que es de muy mal gusto y es algo que ya vemos "normal".
Espero sembrar un granito de conciencia en al menos unos de ustedes para la próxima vez que queramos regatear pensar si realmente es justo.
Ahora si las imágenes :)
♡
Delpozo.
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En lo que comentas sobre regatear, realmente te comprendo y estoy de acuerdo, en lo personal a mi no me gusta hacerlo, porque me da mucha pena y entiendo que al gente necesita de esa ganancia, no es como que quieran estafar con el precio, siempre hay que valorar el trabajo de todos, artesanos, prestadores de servicio. En mi trabajo (soy contadora) realmente no valoran nuestro trabajo y siempre siempre regatean el precio. Es cosa de concienciar sobre cuando si y cuando no esta bien hacerlo, cuando es justo.
ResponderEliminarGracias por siempre comentar Yuriana. ♡
EliminarTal vez tienes razón sobre cuándo sí y cuando no hacerlo, pero no abusar y no hacerlo con gente que lo necesite y vive de eso. ¡Saludos!